Always summer, aquel pequeño descapotable rojo

Nueve en punto de la mañana, suena mi horrible despertador y como si tuviese que correr a un refugio nuclear me meto en la ducha, el agua caliente se acaba, odio los putos calentadores electricos que no dejan que pueda hacer efecto mi crema de pelo al alisado japonés, abro el armario y cojo cualquier cosa y unos Prada, me los anudo fuertemente, cojo una manzana y vuelo hacia el metro, ¿Nunca os a pasado que de repente alguien, alguien a quien no conoceis y que jamás habeis visto se cruza contigo y en un segundo, solo por su perfume te parece como si os conocierais de toda la vida? Eso me paso aquella mañana, en un segundo sin saber como ni por que mi cabeza retrocedio a aquel verano en el que por primera vez para bien o para mal

    

empezé a ser yo mismo, cerré los ojos y la calle Claudio Coello se convirtió en Hortaleza y el otoño se torno verano y la calle se lleno de bulla ,de gente, su perfume, ese perfume se hizo fuerte en mi nariz y de el empezaron a brotar los colores, las personas que conocí aquel primer verano en madrid, es verdad, lo confirmo y ese día me quedó mas claro que nunca, las cosas pasan si tienen que pasar y como tienen que pasar, cruzando Goya un pequeño descapotable rojo con la capota puesta se detiene, el semaforo esta verde para mi, los coches se tienen que parar, el coche toca el claxon y de repente una mano me saluda por la ventanilla y en seguida reconozco aquel fiat punto y a su dueño, en un segundo, todo cayó sobre mi, mil recuerdos, experiencias, aquel verano loco y ese segundo se hace eterno, saludo y sigo hacia delante como si nada, como si tiempo antes del claxon su recuerdo, su perfume no volaran en mi mente esactamente igual que aquel verano, son otros tiempos, pense, otros muy distintos, las cosas han cambiado y yo ya no soy aquel salvaje que conociste mientras tu arreglabas tu moto en la calle pero... si pudiera elegir, si en algun momento alguien me diera esa opción, volvería, volvería a ese verano y como aquel verano, al verte, me hubiera parado y en vez de haber seguido hacia delante me habría metido en tu coche y habría desaparecido del mundo por unos minutos, unas horas, unos días o quien sabe, quizás esta vez hubieramos desaparecido para siempre.